Einstein, con eso de
la estupidez humana, vuelve a tener razón
Escuchar a Nicolás
Maduro es todo un ejercicio de análisis del masoquismo más perverso. Con
mejores calificaciones, el alumno superó al maestro -sentado junto a Dios-
según versión del candidato usurpador de la presidencia de Venezuela. Los
discursos amenazantes -del antaño conductor de bus- usando idéntico tono y
palabras del fallecido "comandante" golpista, resuenan en una
Venezuela desunida y aturdida por mensajes disonantes. La estupidez meridiana
del aparecimiento de Chávez en forma de pajarito susurrándole al odio, dio la
vuelta al mundo y predijo lo que puede esperar el país si ese patán de Maduro
gana las elecciones, algo probable tras haberse descubierto como personas de su
entorno cuentan con las claves para manipular los resultados electorales.
La peor noticia
-además de la construcción de pobreza y escasez instauradas por el desaparecido
Chávez- es cómo discursos infantiles, agresivos y propio de iletrados llenan
calles y plazas (si creemos lo que informan manipuladoras emisoras de TV) ¿Qué
capacidad de distinguir tiene gente envuelta en una hipnosis galopante que apoya
con sus gritos a un golpista? ¿Así es el "pueblo" venezolano? ¿Saben
de los millones dilapidados por Chávez en el exterior que podrían haber
generado riqueza en el interior? ¿Son conscientes de su futuro? Ciertas
preguntas parecieran no importarles a una masa -suficientemente descrita por
Ortega y analizada por Sartori- que conforma ese concepto manoseado y
desprestigiado de "pueblo" que intentan sobreponer al de democracia y
República que ha fijado el rumbo de la construcción política del ultimo siglo.
Surge nuevamente la apuesta por el autoritarismo, con el agregado de estar
liderada por figuras sin suficiente masa crítica cerebral que con cuentos -risibles
para niños de pocos años- exaltan a masas en trance y adoctrinadas que claman a
un bufón que en patriótico pants les
silba o les tocas los timbales repitiendo su nombre ¿Qué sentido común tiene
todo eso? ¿Qué grado de racionalidad se puede aplicar a ese circo?
Sobre ese postulado
de "masa inconsciente", impropio del siglo XXI, intentan construir
regímenes del inicio de la era del ser humano donde el ruido gutural, apenas
comprensible, debió haber sido la forma de comunicarse o de aquellos otros del
absolutismo monárquico, en el que la maquinaria de fuerza real imponía su
estilo y ley en la demarcación que dominaba ¡Tantos años de esfuerzo
filosófico-político para explicar que la división de poderes es necesaria, que
el autoritarismo condena a la sociedad, que la libertad debe de ser el centro
de gravedad de las relaciones humanas y la justicia el eje fundamental que dirima
las diferencias, entre otros principios, para que payasos enfermos de poder
convenzan a masas manoseadas y utilicen el supuesto ilegal e inmoral del
"poder del pueblo" por sobre el Estado de Derecho. Así son ciertos
países. La historia demostrará que hubo un "grave error", lo malo es que
en el tiempo que dura esa situación
-demasiado normalmente- se asesina a personas y se traza un equivocado rumbo
que requiere de decenas de años para modificarse: Cuba, Corea Norte, Rusia,
etc. En países exitosos, ese tipo de personajes nunca tuvieron éxito, pero
tampoco es común contemplar sociedades de zombis que voluntariamente se
revuelcan en el fango al alarido victorioso de discursos que no tienen una sola
palabra de coherencia y menos de sentido común. Si Darwin viera todo esto
apostaría, además de por la teoría evolucionista, por otra desvolucionista, ¿o será la deconstrucción foucoliana de la estupidez del ser humano? Por aquí parece que no
es muy distinto, aunque con estilo propio.
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