Entradas populares

lunes, 23 de julio de 2012

Tierra y riqueza


Creen que el dinero lo hace todo y terminan haciendo todo por dinero

No hay populista, desbaratado ni arcaico irredento que no justifique el ladronzuelo proyecto de la reforma agraria y promueva el reparto -redistribución le llaman- de la tierra. Resumidamente: darle a cada "campesino" un trocito (nunca dicen a quién, cuánto, dónde ni cómo) para que pueda salir de la pobreza o similar justificación. Pueden repartir el mundo en partes iguales -algo imposible- pero al día siguiente ya habrá quien perdió su propiedad, no quiso trabajarla, no supo aprovechar la ocasión o simplemente la vendió. Por el contrario, surgirá el trabajador afanoso, aquel que solicite un préstamo y lo invierta o quien busque cómo producir más y mejor. En poco tiempo el mundo estaría en idéntico punto de partida. Es feudal y primitiva la creencia de que la riqueza radica en la posesión de la tierra, aún con recursos naturales. Antiguamente, contar con grandes extensiones de terreno permitía la agricultura, la ganadería y otras actividades asociadas a lo que en aquel entonces generaba riqueza. Hoy, sin embargo, los exitosos -despreciados por algunos en público y adulados en privado- resultan ser desarrolladores de ideas, creadores de sistemas operativos, de redes sociales multitudinarias o de productos de aceptación mundial. No necesitan tierra, reforma agraria ni leyes de desarrollo rural, cuestiones propias de la medieval búsqueda de la piedra filosofal. Entienden -por eso son ricos- que el emprendedurismo y la capacidad de posicionar una buen idea son pilares necesarios para tener éxito, además de practicar otros valores: perseverancia, responsabilidad, capacidad de asumir riesgos, etc.
Por aquí, sin embargo, vendedores de ilusiones pagados por frustradores de las mismas, especulan con recetas fracasadas en otros lugares. Insisten -contumazmente- en acometer una reforma agraria camuflando sibilinamente la idea de expropiación que es lo que preside el pensamiento ideologizado que les atormenta y que otros dictadorzuelos implementaron con estrepitoso y documentado fiasco. Dicen apostar por energías limpias, pero se oponen a construir instalaciones adecuadas y modernas que permitan el desarrollo de muchas comunidades, mientras roban la energía que otros producen y la venden a usuarios a menor precio, como pasa en Occidente. Es preciso buscar cómo reducir la pobreza y la forma de promover un mejor ambiente, pero no sobre la base de caducas fórmulas, intereses de mafiosos, manifiestos delitos o apaños lucrativos; la certeza jurídica de la propiedad es la piedra angular. Percibo un hipócrita discurso de los que viven de estos temas y están sostenidos con donaciones de quienes no desean el progreso sino mantener la miseria porque de lo contrario se quedarían sin discurso -ni trabajo- y necesitan seguir realizando “importantes” investigaciones sobre la realidad de las comunidades pobres del interior, la explotación oligárquica histórica y otras desubicadas bagatelas. Mientras tanto, aquellos que ponen el dinero para que eso sea posible -en dólares, euros o coronas-  habitan el primer mundo, no pagan impuesto aquí, consumen mas energía en un mes que usted en un año (Al Gore como ejemplo), se movilizan en vehículo particular con chófer huyendo del transporte público, tienen escolta policial que otros pagamos o promueve seminarios donde reúne a los que compran a buen precio para que divulguen esas ideas y como han llegado a la sesuda conclusión de que a usted le corresponde un trocito de tierra que lo saque de la miseria, aunque a ellos les interesen otras cosas ¿Sostendrían el mismo discurso entre los indígena sioux, apaches o cheyennes norteamericanos? ¡Lo que hay que ver y oír!

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Hasta que hubo alguien que escribió la realidad sobre los ROBOS de los SUCIALISTAS que ellos llaman: "redistribución de la riqueza", pero que jamás declaran que la "redistribución" real va a parar a los bolsillos y cuentas bancarias que ellos, sus nepotes y demás secuaces, así como sus mercenarios encargados de sojuzgar al pueblo que despotizan, tienen en "paraísos fiscales" hacia donde se va el dinero de, inclusive la masa parásita, idiota y codiciosa que los encarama al poder pendejeados por las mentiras que les prometen!

¡Felicitaciones, don Pedro! ¡Personas como usted siempre son bienvenidas por la gente DECENTE de este País! ¡Siga así, y SIGA AQUÍ!